ESTIMULACIÓN TEMPRANA: 10 A 12 MESES DE EDAD
Colocarlo en posición de gateo y empujarlo suavemente hacia delante, hacia atrás y hacia los costados.
Dejarlo gatear para que adquiera fuerza en brazos y piernas.
Ayudarlo a pararse apoyado en los barandales de la cuna, ponerle un juguete en el suelo de la cuna para que se agache y lo recoja.
Ayudarlo a dar sus primeros pasos tomándolo de ambas manos, luego de una sola mano.
Hacerlo permanecer un rato de pie sin tomarse de nada.
Darle objetos pequeños que pueda tomar con sus dedos índice y pulgar (pasitas o palomitas de maiz, etc), cuidándolo para que no vaya a tener algún accidente, como ahogarse si se lo come.
Constiruir una barra de madera donde se puedan colocar aros para que el bebé los quite uno por uno.
Permitirle hacer garabatos o rayones en hoja de papel y con una crayola.
Enseñarle a respetar espacios tratando de que juegue siempre en un lugar de la casa y no dejando sus juguetes por todos lados. Esta edad es un buen momento para empezar a crear hábitos como lavarse las manos, guardar sus juguetes.
Arrojarle una pelota y dejar que la persiga y la devuelva.
Provocar ruido con diferentes objetos (llavero, cuchara, etc) para llamar la atención del bebé y permitir que asocie el sonido con el objeto correspondiente.
Ofrecer y pedir objetos comunes ( comida, juguetes) para practicar el “ten y dame” y que inicie la comprensión de órdenes sencillas.
Preguntarle ¿dónde está papá? (o nombres de personas u objetos familiares) para que él trate de buscar lo que se le pide, tratar de repetir la última palabra.
Poner canciones infantiles y cantar procurando que imite.
Pedir a los padres realizar el sonido de un animal cuando lo vea (miau, guau...) e insistir hasta que lo repita.